Ha comenzado el juicio contra los supuestos colaboradores del atentado contra la revista Charlie Hebdo, que dejó 15 muertos en la revista más los tres terroristas que perpetraron la masacre. Por ese motivo se han vuelto a publicar las viñetas satíricas contra el profeta Mohamed. Las víctimas han sido exaltadas como mártires de la libertad de expresión. Definitivamente Europa pierde el Norte. Ante la aplastante censura sobre temas como los millones de pobres y desempleados que tendrá Europa en un par de años a causa de la pandemia o la situación de los refugiados en Grecia, hay cierto periodismo que sigue proclamando la libertad de insulto como libertad de expresión.
Ha tenido que ocurrir un devastador incendio en el campo de concentración de Moria -llamado campo de refugiados- para que los medios se acuerden de las miles de personas atrapadas allí por los muros europeos desde hace cinco años, levantados por sus injustas leyes y por sus empresas de seguridad, que cuentan con licencias y contratos millonarios por la propia UE. Curiosa censura y curiosa nueva libertad de expresión faltar el respeto a millones de creyentes, que por otro lado, de ninguna manera justifica un acto terrorista.
También nosotros recordamos el análisis y el posicionamiento que manifestamos en el momento del atentado que se está juzgando ahora, casi cinco años después de que fueran asesinadas doce personas y heridas otras once.