Jóvenes, lucha y cultura

Llevamos unos cuantos días dándole vueltas a Greta Thumberg desde varios puntos de vista. Que si detrás tiene el apoyo de grupos multinacionales cuya implicación en el deterioro del clima no es nada desdeñable, que si los padres impulsan su papel como personaje público, que si su trastorno, etc.

Quisiera centrarme solo en un aspecto de estas críticas y con ello recordar a otras dos personas que, en mi opinión, no han tenido tantísima repercusión mediática.

Ha habido quien ha criticado a Greta por ser una niña, o si queremos una joven de 16 años, como si la edad representase en sí misma un impedimento para luchar por lo que se cree justo. Parece que ya no recordamos a Malala Yousafzai, luchadora pakistaní en pro del derecho a la educación de niñas y niños sin discriminación, que sufrió un atentado con tan solo 15 años y recibió el premio Nobel de la Paz -aparte de otros muchos- con 17 y que continúa su lucha a nivel internacional con los mismos objetivos. Bueno es recordar también a Iqbal Masih, joven cristiano paquistaní militante del Frente de Liberación del Trabajo Forzado cuya lucha contra la esclavitud infantil junto a Ehsan Ullah Khan le llevó a cerrar varias empresas que usaban niños esclavos y que elevó su voz también a nivel internacional siendo premiado en Estocolmo y Boston. Por desgracia, Iqbal fue asesinado en 1995, con tan solo 12 años.

Pues bien, observando y comparando estas figuras creo que es bueno llamar la atención en lo siguiente. Iqbal abrió escuelas para promocionar a los niños que conseguía liberar y aún resuena su frase «Children should have pens in their hands, not tools» -«Los niños deberían tener bolígrafos en sus manos, no herramientas«-. Por su parte Malala, nacida dos años después de la muerte de Iqbal, ya hemos visto que centra su lucha en el derecho a la educación de todos tal y como expresó en la ONU; «One book, one pen, one child and one teacher can change the world» -«Un libro, un bolígrafo, un niño y un profesor pueden cambiar el mundo«-. Sin embargo, el contraste es grande cuando vemos que Greta y el movimiento Fridays for Future defiende entre otras cosas, no acudir los viernes a los centros de enseñanza -huelgas por el clima- como medida de protesta.

Nos viene a la mente una vez más el grito de los militantes empobrecidos en la I Internacional «contra la ignorancia libros y periódicos» y lanzamos una pregunta. ¿Veremos algún numeroso movimiento de jóvenes luchando por la justicia que se caracterice por querer aumentar su cultura, incluso más allá de lo que les propone el sistema educativo formal?

José Manuel Cidre