El pasado martes por la mañana, tras echar de allí a los periodistas y a los voluntarios; las fuerzas de seguridad de la República de Grecia procedían al desalojo del campo de refugiados de Idomeni, tristemente famoso ya por la situación infame e inhumana en la que sobrevivían sus ocupantes desde hace meses.
Quisiera incidir aquí en un punto, a mi juicio clave, y que ha pasado muy desapercibido en los retazos de la noticia que han llegado hasta nosotros.
La policía que arrojaba a los refugiados de ese trozo de tierra donde malvivían, cumplían órdenes de Alexis Tsipras, el líder de la coalición autodenominada «Izquierda Radical» -Syriza-. Un partido que en nuestro país unos jalean y otros estigmatizan por «antisistema».
Tsipras, el mismo que llegó al poder prometiendo no bajar sueldos, ni pensiones, el que prometió plantar cara a la Troika y ha acabado tragándose el resultado del referéndum que propugnó, aplicando los recortes que rechazó, y que en España ha justificado públicamente Pablo Iglesias; ese mismo Tsipras; remató la faena llevando a las últimas consecuencias los designios de Bruselas, pateando de su territorio a los últimos de nuestro mundo, los sin tierra víctimas de la guerra.
No debería sorprendernos esta despreciable traición. No hace muchos años entre nosotros llegó al poder un partido prometiendo puestos de trabajo, sacarnos de la OTAN, impuestos a las rentas altas y nos dejó…con 3 millones de parados, contratos basura y corrupción generalizada.
Que la derecha se comporte como lo que es, no sorprende. Que la izquierda «antisistema» se convierta en un triste lacayo de éste, parece una broma pesada de la Historia.
Así que nadie se extrañe de que un posible gobierno «republicano» de «Unidos Podemos» ejecute devoluciones «en caliente» de forma cotidiana en nuestra frontera Sur. Sus «socios» de la República de Grecia ya nos han dado un adelanto. Avisados estamos.
José Manuel Cidre Mascato