Vemos estos días largas filas de refugiados sirios, y de todo oriente medio, llegando a nuestras fronteras. Pasando una tras otra, aguantando y superando toda clase de calamidades, obstáculos y privaciones.
Si estamos atentos, veremos también en las noticias, las hienas que les acechan. Hay que buscar con atención en las noticias porque no salen mucho: es una vergüenza más que la Unión Europea reserva a los parias.
Hay hienas que van en grupo: cerca de las columnas de refugiados, en los mismos centros. Ya empiezan a salir en las noticias los casos de violaciones, mujeres obligadas a ejercer la prostitución, desapariciones, principalmente de niños y mujeres, ¿prostitución? ¿tráfico de órganos?. Pero la realidad es que, en la Unión Europea vuelve a haber “desaparecidos”, como en las dictaduras del S. XX de infausto recuerdo. Cuando la policía vigila sobre todo que no haya tráfico de droga, cuando los robos, violaciones y secuestros son cosas de segundo nivel… cuando se tiene un sistema de asilo tan deficiente como el nuestro, cuando, ante una emergencia humanitaria como ésta, lo primero que pensamos es “que a mí no me salpique”, las hienas surgen inmediatamente. Son consecuencia directa de las condiciones de juego que hemos impuesto nosotros.
También hay hienas que van en coche, muchas veces oficial. El Frontex está buscando empresas para vigilar las fronteras. Parece que los Estados no están dispuestos a mandar al ejército y se subcontrata la vigilancia de fronteras. Aquí también hay dinero que ganar, millones de euros, “gracias” a refugiados muertos de hambre. Las hienas mejor posicionadas en la carrera son: la francesa DCI (Fabrice Leggeri, director ejecutivo del Frontex es francés), la española INDRA (Gil Arias-Fernández, director ejecutivo adjunto del Frontex es español) y la letona SIA MIKC (personal del Frontex encargados de elaborar los pliegos son letones). El binomio multinacional-cargo público es la base del funcionamiento diario en la Unión Europea. No es una consecuencia de las condiciones de juego. Esta vez son las condiciones mismas del juego.