Disponer de una DEMOCRACIA FORMAL representativa, significa que no existe DEMOCRACIA REAL , ya que decisiones que afectan a millones de seres humanos, están tomadas por una minoría (poderes políticos, económicos, financieros y culturales) que están fuera de cualquier control democrático.
Por eso defendemos la Autogestión, democracia real, como una forma de cultura en la que cada persona sea protagonista de su vida personal y colectiva. No se trata de que el pueblo participe cada cuatro años, sino de que el pueblo gestione. LIBERTAD y PROTAGONISMO PERSONAL, y BÚSQUEDA DEL BIEN COMÚN son los principios sustantivos de la Autogestión, de la que en nuestra sociedad existe amplísima experiencia: políticamente desde los antiguos concejos hasta el municipalismo. Económicamente desde las formas comunales de explotación agraria a la riquísima experiencia cooperativista. Social y culturalmente desde la cultura obrera y el sindicalismo revolucionario hasta la libre asociación de personas y familias que construyan solidaridad.
El MUNICIPIO, junto con las familias y la asociaciones que lo componen, por su cercanía a los problemas de sus convecinos debe tener el máximo protagonismo político, debiendo tener capacidad de gestionar la gran mayoría de los asuntos que les atañen. Por eso nos preguntamos cómo Podemos, un partido político que dice querer representar la verdadera democracia, no se presenta a las próximas elecciones municipales. Construir estas posibilidades autogestionarias desde el municipio es lo que pretende el partido SAIn.