Apartheid sanitario. Respuestas políticas ante las migraciones

Santiago02Este es el título del último encuentro político que ha tenido el Partido SAIn de Galicia en Santiago de Compostela. El propósito de este encuentro era seguir profundizando en la situación de los migrantes y sobre todo en dar respuestas políticas planteando medidas a nivel local. Para ello contamos con personas que de primera mano conocen las situaciones concretas y arrojan luz sobre las necesidades a las que hay que responder. En esta ocasión, contamos con Iria Gippini, coordinadora de Médicos del Mundo (MDM) en Galicia, que compartió con nosotros sus reflexiones a partir del último informe del Observatorio del Red Internacional que revela la dramática e injusta situación sanitaria de las personas desplazadas por la guerra.

El año 2015 hemos podido ver hechos de solidaridad y acogida muy valientes. La respuesta solidaria de las personas y asociaciones, especialmente de las personas migrantes nos han dado grandes lecciones.

La respuesta de los gobiernos ha sido vergonzosa. Los gobiernos europeos no sólo no tradujeron esa solidaridad en realidad, sino que siguen legislando para fortalecer muros y fronteras.

El informe de la Red Internacional de MDM ha sido elaborado con los datos de 37.012 consultas médicas en 11 países de la Unión Europea (Alemania, Bélgica, España, Francia, Grecia, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos, Reino Unido, Suecia, Suiza) y Turquía.

Mencionamos algunos datos que nos dan una idea de la situación de las personas migrantes que acudieron a esas consultas:

  • El 41,8% son mujeres.
  • El promedio de edad es de 35,9 años.
  • El 94,2% de los pacientes son extranjeros.
  • El 50,6% está en situación administrativa regular.
  • El 53,1% emigró por razones económicas, el 20,5% por razones políticas y el 13,7% para escapar de la guerra. Sólo el 3% emigró por razones de salud.

El 40% de las personas requieren atención urgente o muy urgente; más de un 70% necesita tratamiento. El 67,5% no tienen cobertura sanitaria.

Este es el marco, que Iria “bajó” a la realidad gallega y local. Se calcula que en Galicia hay 90000 personas inmigrantes, 8700 personas están fuera del sistema sanitario. No son cifras que supongan ningún problema económico para la sanidad pública. Iria fue desmintiendo los mitos sobre las personas inmigrantes (colapsan el sistema sanitario, no aportan al sistema de salud, entre otros) y afirmó que el Real Decreto que expulsó a muchas personas del sistema sanitario no ha supuesto un ahorro.

Tenemos derecho a la asistencia sanitaria pero actualmente se niega ese derecho con trabas burocráticas, requisitos, facturación por defecto, exigencia de informes sociales, peticiones de documentación del país de origen, etc. Muchas medidas y trabas son disuasorias, y las personas que reciben estos mensajes tienen miedo a acudir al sistema de salud. Cuando llegan al sistema de salud muchas veces son con dolencias más graves y que requieren una intervención más costosa, que si hubiesen sido abordadas desde atención primaria.

¿Qué se puede hacer? Iria nos habló desde el derecho. Hay que garantizar el derecho a la asistencia sanitaria. Derogar el Real Decreto. Decir NO a todas las trabas que impiden que cualquier persona acceda a un derecho fundamental como es el de la salud. Los funcionarios deben conocer los sistemas de protección (medidas especiales) y aplicarlos; comunicarse entre las administraciones para facilitar el acceso a las personas y no marearlas de ventanilla en ventanilla; la documentación necesaria no debe ser obstáculo. Que los formularios de medidas especiales estén disponibles; que se acceda a toda la información fácilmente y a través de mediadores. Cesar la facturación por defecto, informar del gasto pero no someter a las personas al miedo y la amenaza de verse en una lista de morosos. No es necesario pedir documentación de los países de origen.

Las personas debemos reclamar, reclamar, reclamar. Mientras haya silencio resolveremos problemas particulares, pero no el problema político de fondo.

Los Ayuntamientos tienen un papel fundamental desde la medida más sencilla de facilitar el empadronamiento, hasta medidas en cuanto a la salud, la vivienda, el agua, la luz. La salud empieza por medidas para facilitar la higiene básica y la alimentación. El Ayuntamiento tiene mucha responsabilidad en hacer incidencia política y analizar jurídicamente las posibilidades para hacerlas más grandes.

Iria nos comentaba que a nivel político veía inacción, miedo… y las personas siguen indefensas. No olvidemos que la salud es un negocio tremendo, más grande que el del petróleo.

Gracias Iria por compartir con nosotros.

Santiago01