La violencia sigue aumentando cada año en el mundo. 3.800 personas mueren al día por actos de violencia directa. El 90% sucede en países empobrecidos. No sólo las guerras que salen en la prensa, pues la violencia callejera y la delincuencia organizada provocan más muertes que los tanques y los aviones. Aumenta la violencia en los hogares, en las escuelas, violencia contra los más débiles (niños, ancianos, mujeres etc.).
El terrorismo está acabando con aquella falsa sensación de seguridad y “paz” que vivíamos en los países enriquecidos hasta hace poco. Atentados como los de Barcelona sacuden a la sociedad y nos sacan de nuestra indiferencia y provocan todo tipo de reacciones: miedo, xenofobia y odio, posturas “a la defensiva” o justificaciones e instrumentalizaciones ideológicas.
Tendemos a buscar de forma simplista un culpable al que señalar y siempre son “los otros”. ¿quién hace autocrítica hoy en día? De esto modo los trágicos episodios de violencia directa agravan la polarización de la sociedad, la confrontación de unos contra otros… y la espiral de la violencia sigue aumentando.
¿Cómo romper esta espiral de la violencia? La historia reciente está plagada de cientos de experiencias de lucha noviolenta que han demostrado ser la única forma de romper ese círculo vicioso, contribuyendo de forma eficaz a combatir la injusticia y la opresión de la que nace toda violencia. La inmensa mayoría de ellas ha sido protagonizada por los propios empobrecidos y oprimidos. Experiencias como la de la organización India Ekta Parishad, compuesta por intocables, campesinos sin tierra, comunidades tribales marginadas, etc, que llevan décadas luchando desde abajo, siguiendo los pasos de Gandhi y consiguiendo reducir la violencia y sus causas.
Desde su experiencia ahora lanzan al mundo el reto de globalizar la noviolencia como forma de respuesta y han puesto en marcha a nivel mundial la Campaña Jai Jagat, que culminará con una marcha a pie desde la India que llegará a la sede de la ONU en Ginebra en Octubre de 2020. En nuestro país, diversas organizaciones hemos constituido la Plataforma Jai Jagat-España para impulsar la campaña.
Jai Jagat significa “victoria para el mundo”, porque precisamente quieren demostrar que es posible romper la lógica de la competitividad, de que para que unos ganen otros tienen que perder.
Jai Jagat 2020 es un desafío a los organismos internacionales, a las sociedades de clase media y a las comunidades empobrecidas; pretende cambiar el actual modelo de desarrollo antihumano e insolidario, acabar con la marginación y el hambre, con la injusta economía que provoca millones de desplazados y que está arrasando el planeta. Esa es la victoria que todos necesitamos, la única que puede acabar con la violencia que todos sufrimos de un modo u otro.
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