La realidad del trabajo

 

TrabajoLo normal en las familias trabajadoras del mundo es vivir en la pobreza. Mientras los salarios bajan, los precios de los alimentos básicos se doblan por culpa de la especulación.

La mayoría de trabajadores del mundo ganan menos de dos dólares al día.

Es normal soñar con escapar del infierno e intentar emigrar aunque acabe en la pesadilla de una fosa común o internamiento en un centro de detención.

Más de 20.000 kilómetros de muros y vallas separan a pueblos de todo el planeta. Intentan restringir el derecho a migrar (iuris migrandi) que, al menos hasta el siglo XIX, era “patrimonio de toda la Humanidad”. El Siglo XXI será el de los muros y las fronteras contra los inmigrantes.

Se ha producido la mayor movilización financiera de la historia para tapar el desastre de los especuladores y magos de las finanzas y se sigue considerando que la subida de salarios amenaza la economía mundial.

España acoge calurosamente cada año a más de sesenta millones de turistas extranjeros, pero en sus fronteras los extranjeros pobres mueren.

FRENTE A ESTO EXIGIMOS:

  • Salarios justos, legislación laboral vinculante y autoridad laboral capaz de hacer frente a los abusos a los trabajadores.
  • Un sindicalismo que afronte el peligro de la coordinación de los grandes conglomerados multinacionales y que deje de apostar por huelgas de un solo día y en un solo país.
  • Plena protección jurídica a los inmigrantes ratificando y promoviendo tratados internacionales que garanticen la tutela de los derechos de los trabajadores migrantes y miembros de sus familias.
  • Hacer frente en común a la estrategia de infiltración de las compañías multinacionales en los Estados y de su capacidad de provocar la progresiva reducción de salarios.
  • Perseguir eficazmente la evasión fiscal y la red mundial de secretos bancarios.
  • Control de la tecnología para que la nueva revolución tecnológica que vivimos no aplaste a los débiles.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.