Casas limpias… corazones sucios

TrabajoDomestico“En cuanto a los tipos de explotación y de coacción a los que están sometidas las víctimas de trata para explotación laboral en el servicio doméstico, se han detectado los siguientes casos:

Sueldos inferiores al establecido legalmente. En un caso se detectó un sueldo de 80$ para 16 horas de trabajo diarias y tareas múltiples. Imposición de horarios excesivos, con jornadas de hasta 16 horas diarias, o disponibilidad durante las 24 horas en casos de internas. En casos de retribución en base del salario mínimo interprofesional, no se abonan las horas extraordinarias con lo cual el sueldo real por hora trabajada es mucho menor que el previsto. Trabajo sin pago. Retención de la documentación de la víctima. Restricción de movimiento libre de la empleada, con víctimas encerradas en la vivienda, sin posibilidad de salir.

Agresiones físicas, maltrato y agresiones sexuales. Amenazas de agresiones físicas e intentos de abuso sexual. Maltrato psicológico, desprecio hacía la empleada, gritos constantes incluso por parte de los niños a su cargo. Negación de asistencia…” (1)

Ante esta realidad de explotación. En el día de la mujer trabajadora queremos lanzar un grito desde lo más hondo de nuestras entrañas en defensa de las mujeres oprimidas.

Nosotras, madres y mujeres trabajadoras de España, nos negamos a combatir contra nuestras hermanas y hermanos empobrecidos del otro lado de la frontera Norte-Sur. Nos negamos a que nuestras viviendas reluzcan limpias y nuestros hijos estén atendidos a costa de hermanas que para limpiar nuestra porquería han de arrancarse de sus raíces. Nos negamos a que para que nuestros hijos estén cuidados miles de mujeres en el mundo tengan que abandonar a sus hijos en países, que primero hemos empobrecido, para que los nuestros vivan a capricho. Nos negamos a aceptar que para poder desarrollar nuestra vocación, nuestra familia y profesión sea necesaria la explotación de mujeres trabajando por salarios irrisorios en horarios interminables en nuestros hogares. Nos negamos a afirmarnos como mujeres humillando y degradando a la semiesclavitud a otras mujeres.

Por eso nos atrevemos a decir, que es preferible la defensa de la dignidad de los explotados que la limpieza del polvo de nuestros hogares.; que es preferible la lucha por la Justicia a las limpias camisetas de nuestros hijos.

Es necesario que nuestras personas y nuestras familias se puedan construir desde la libertad y la responsabilidad y por tanto hacer que unidas con nuestros esposos, nuestros hijos no se eduquen en el capricho sino que se formen como personas asumiendo su responsabilidad limpiando lo que ensucian, ordenando lo que usan, cocinando lo que comen.

¡No más mujeres explotadas! ¡No más mujeres explotadoras! ¡No más familias rotas por la explotación!

Afirmamos, en todo caso, que si de elegir entre luchar por la Justicia y la Solidaridad o la limpieza de nuestros hogares con la explotación de otras mujeres se trata… es preferible casas más sucias pero corazones más limpios. Corazones que nos permitan tratar como hermanas y hermanos a los que hoy mueren de frío o ahogados a las puertas de Europa.

Sabemos, por la historia de los empobrecidos y por la del Movimiento Obrero en concreto, que familias responsables y solidarias tendrán ambas cosas: practicarán la Justicia y educarán a niños y jóvenes responsables y protagonistas de sus vidas que no necesitarán de esclavos. Serán hombres, mujeres y familias libres.

Hacemos un llamado a sumaros a la construcción de un mundo sin esclavos ni amos. A la necesaria reflexión y la lucha contra las causas del paro, de la explotación y de la esclavitud.

En la cercanía del 16 de abril, día internacional contra la esclavitud infantil; conmemoración del asesinato de Iqbal Masih, niño esclavo de 12 años que cerró empresas esclavistas… En la cercanía del 1 de mayo día internacional del Trabajo en un mundo de mayor explotación… Queremos acabar como empezamos… con un
grito… de Esperanza:

¡La familia es la piedra angular del edificio social!

¡El futuro de la Humanidad se fragua en la familia!

¡No más explotación de unas familias a otras!

 

Por Marta Prieto

 

(1) Esclavitud y trata en el servicio doméstico. 17.04.2012 • Periodismo Humano